Caracas, Venezuela – El Gobierno de Venezuela, a través del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (CEO-FANB), anunció este viernes el despliegue de 1,200 efectivos en todo el territorio nacional con el objetivo de «garantizar la paz» de cara a la toma de posesión presidencial, prevista para el próximo 10 de enero de 2025.
El coronel Alexander Granko Arteaga, miembro de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), señaló en un video difundido en redes sociales que el operativo busca asegurar la estabilidad del país ante la juramentación de Nicolás Maduro como presidente reelecto.
«Vamos a garantizar la paz del país, darle seguridad al pueblo y garantizar que el 10 de enero se juramente el presidente. Nosotros también nos juramentamos con él», declaró Granko Arteaga.
El coronel destacó que los operativos contra grupos mercenarios han producido «resultados fructíferos» en años anteriores y reiteró que este año no será la excepción.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro confirmó que asistirá a la sede del Parlamento -controlado por el chavismo- para jurar como mandatario reelecto por un nuevo período de seis años, tras ser proclamado ganador por el Consejo Nacional Electoral (CNE) en los comicios del pasado 28 de julio.
Denuncias de fraude y tensión política
Mientras tanto, la oposición, agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), denunció el proceso electoral como fraudulento y aseguró que su candidato, Edmundo González Urrutia, fue el verdadero ganador de las elecciones.
González Urrutia, quien se encuentra exiliado en España desde septiembre, declaró su intención de regresar a Venezuela para la toma de posesión y llamó a los ciudadanos a unirse para defender lo que calificó como el «mandato legítimo» del pueblo.
En un giro reciente, la Policía venezolana ofreció una recompensa de 100,000 dólares por información sobre el paradero de González Urrutia, a quien acusan de múltiples delitos, entre ellos «complicidad en actos violentos contra la república» y «usurpación de funciones». Una imagen difundida por las autoridades lo califica como «Se busca», detallando una serie de cargos en su contra.
Escenario de incertidumbre
El despliegue de la FANB y las declaraciones cruzadas entre oficialismo y oposición reflejan un clima de alta tensión política en Venezuela. A medida que se acerca el 10 de enero, el país se prepara para enfrentar un momento crucial que podría definir su rumbo político y social en los próximos años.
